Su director, Gunnarsson, es un conocido realizador en su país y con una larga trayectoria en la televisión canadiense y que cuenta en su repertorio con largometrajes como Diplomatic Immunity (1991), Such a Long Journey (1998) , El secreto de mi vecino (Rare Birds, 2001) o Beowulf & Grendel (2005). En esta ocasión se junta con Purcell, británico nacido en Australia que posee una cara de sobras conocida por su papel en la serie Prison Break (2005-2009), en la que interpretaba a Lincoln Burrows, hermano del protagonista. En el cine le hemos podido ver tan solo el año pasado en películas interesantes de bajo presupuesto como Assault on Wall Street (2013), Suddenly (2013) o Testigos (Breakout, 2013), y confirma con Soldados de hielo su etiqueta de fijo de este tipo de producciones que casi podríamos llamar telefilmes pero que gozan de una realización y recursos ligeramente superiores a los habituales. El filme se permite incluso el lujo de contar con el gran Michael Ironside en un papel secundario y con pocas secuencias en pantalla como era previsible. Ironside quedó inmortalizado en la pantalla grande en películas como Top Gun – Ídolos del aire (1986), como el malvado de Desafío total (Total Recall, 1990) o por su papel en Starship Troopers (1997), todo tras su personaje más carismático y recordado, el de Tyler en la mítica serie V (1984-1985).
Soldados de hielo, que cuenta con un interesante arranque un poco al estilo de la saga Indiana Jones, nos cuenta la historia de un accidente aéreo en las heladas praderas de Canadá ocurrido hace 50 años, en la que un grupo de científicos descubrió que los rusos trasladaban tres cuerpos en ese vuelo cuyo destino final parecía ser la ciudad de Nueva York. Antes de poder desvelar las intenciones de tal traslado y los detalles de la naturaleza sobrehumana de estos tres individuos, estos masacraron a toda la base adentrándose posteriormente en los helados parajes montañosos de la zona. Pasados 50 años, nuestro protagonista, un científico con una secreta relación con esos acontecimientos, dirige una expedición en la zona para recuperar esos cuerpos que financia una potente empresa petrolífera con la escusa de buscar yacimientos por explotar de ese oro negro en la zona. Cuando finalmente consiguen localizar y rescatar los tres cuerpos desaparecidos años atrás, éstos parecen cobrar vida a medida que se van descongelando para sorpresa de todos menos de nuestro fornido protagonista. A partir de aquí dará comienzo una caza salvaje por las montañas y pueblos cercanos de estos seres genéticamente modificados para evitar que lleguen a Nueva York y completen así su plan original de atentar contra Estados Unidos des del corazón de la Gran Manzana.
La película goza de un buen ritmo y de un guión cuya mayor fuerza es la lucha personal del personaje de Purcell para consumar su venganza y a la vez proteger al mundo de estos temibles engendros despiadados. En su misión se verá bien acompañado por el actor Adam Beach, etiquetado actor canadiense de origen indio que vimos en Windtalkers (2002), Banderas de nuestros padres (Flags of Our Fathers, 2006) y Cowboys & Aliens (2011), que realiza un estupendo trabajo en segundo plano. Podemos concluir que el conjunto resulta en un filme entretenido con misterios que nos atraen y una historia de la Guerra Fría de fondo que nos cautiva, siempre sin olvidar que se trata de un filme de limitados recursos y poca distribución.
JORDI CIERCO
Trailer:
Ficha técnica:
Título: Soldados de hielo
Título original: Ice Soldiers
Año: 2013
Duración: 95 min.
País: Canadá
Director: Sturla Gunnarsson
Guión: Jonathan Tydor
Música: Jonathan Goldsmith
Fotografía: Stephen Reizes
Reparto: Dominic Purcell, Michael Ironside, Adam Beach, Gabriel Hogan, Benz Antoine, Carinne Leduc, Raoul Bhaneja, Camille Sullivan
Productora: Bunk 11 Pictures / TAJJ Media / Hideaway Pictures
