Ready Player One

Ready Player One

Todo fanático de los juegos de consola, realidad virtual, Steven Spielberg o del cine ochentero debería ver Ready Player One. Es una película que eleva los famosos Easter Eggs a una nueva categoría, inundando la pantalla de referencias hasta límites enfermizos que extrañamente consiguen no cargarse la cinta sino convertirla en un inmenso y carísimo homenaje a los tan de moda Huevos de Pascua. Lo mejor del filme es que algo tan exagerado y aparentemente forzado consigue quedar perfectamente justificado al estar dstrechamente ligado con la trama, que se basa precisamente en eso.

No vamos a entrar en la infinita enumeración de Huevos de Pascua o Easter Eggs presentes en Realy Player One pues no acabaríamos, pero sí destacamos un enorme homenaje a El Resplandor (The Shining, Stanley Kubrick, 1980) así como los geniales guiños a películas como Terminator, El Gigante de Hierro, Batman, Regreso al futuro o King Kong entre muchísimas otras, así como a Minecraft, Mortal Kombat o la clásica Atari del mundo de los juegos. Desde menciones hasta pequeños objetos o nombres, pasando por claras referencias visuales o musicales, la película es un homenaje permanente.

Nos enfrentamos con Ready Player One a un auténtico peliculón que lo tiene todo. Spielberg nos regala una cinta puramente comercial pero de corte clásico en la que los años 80 tienen un protagonismo absoluto. Uno podría pensar que el guión de la película se ha gestado con una táctica ran simple como encerrar durante una semana en una habitación a un grupo de jugones fanáticos de esa moda que son los años 80. Nada más lejos de la realidad pues el libreto se basa en la novela del mismo título publicada por el escritor estadounidense Ernest Cline en 2011.

Año 2045. Wade Watts es un adolescente al que le gusta evadirse del cada vez más sombrío mundo real a través de una popular utopía virtual a escala global llamada «Oasis». Un día, su excéntrico y multimillonario creador muere, pero antes ofrece su fortuna y el destino de su empresa al ganador de una elaborada búsqueda del tesoro a través de los rincones más inhóspitos de su creación. Será el punto de partida para que Wade se enfrente a jugadores, poderosos enemigos corporativos y otros competidores despiadados, dispuestos a hacer lo que sea, tanto dentro de «Oasis» como del mundo real, para hacerse con el premio.

El filme tiene un arranque poco prometedor para los que no somos gamers. Nos presenta una especie de lujosa Death Race envuelta en jerga del ramo que llega a correr el riesgo de desconectar del público profano. Afortunadamente, a medida que avanza la acción nos consigue enganchar con una trama intrigante que nos mantiene pegados a la pantalla durante las más de dos horas de duración la película, que sin duda se hacen cortas.

Como no podía ser de otra manera los efectos especiales y visuales son espectaculares y de una calidad impresionante aunque afortunadamente consiguen aún así no erigirse en protagonistas de la cinta, dejando ese rol para quien debe tenerlo que no es otra cosa que la historia. Esta nos va intrigando progresivamente fascinación nuestra fascinación en la figura del creador del juego, un nuevo Steve Jobs cuyas habilidades en el ramo van en directa contraposición con su integración en la sociedad. Convertido en el nuevo Mesías para todo fanático de Oasis, este personaje casi divino de James Halliday que interpreta humildemente el actor Mark Rylance actúa de transmisor de magia, filosofía y moraleja.

Si hubiera que buscarle algún pero al guión de Ready Player One ese sería, y perdonadme el spoiler, el clímax final de la trama. La evolución del filme nos insinúa un desenlace rompedor, altruista, revolucionario, para luego ofrecernos poco más que un ligero cambio de gestión y de líder en este fantástico y extremadamente monetizado mundo virtual que nos presenta la película bajo el nombre de Oasis. El protagonista, de nickname Parzival, consigue arrastrar y movilizar a toda una sociedad oprimida y ahogada económicamente por el juego que no parece encontrar alivio con el cambio de liderazgo que encarnan los llamados «cinco primeros».
La contraposición entre la épica global del asalto final y el paternalismo y cotidianidad de la reflexión de cierre nos dejan con un sabor agridulce que para nada empaña el entretenido divertimento rato que nos regala Spielberg.

«Algunas personas pueden leer «Guerra y paz» y acabar pensando que es una simple historia de aventuras … Otros pueden leer los ingredientes de un paquete de chicles y descubrir los secretos del universo.»

Aún y asumiendo que Ready Player One es en teoría poco más que una mezcla muy bien calculada de cosas que ya hemos visto antes, hay que reconocer que el resultado es francamente bueno. La cinta gusta y mucho sin necesidad de innovar.
Ni el variopinto grupo de colegas que la protagonizan van mucho mas allá de ser unos Goonies actualizados ni la dicotomía entre la realidad y lo virtual nos brinda nada sorprendente o novedoso. El futuro que nos muestra el filme se ha postulado ya anteriormente y los pequeños conatos de resistencia juvenil contra futuras corporaciones todopoderosas son algo habitual en el cine. Tampoco choca el liderazgo entre los protagonistas de un chaval socialmente inadaptado con graves traumas paternos ni la atracción que este despierta en la chicha del grupo, que comparte evidentemente muchos de sus traumas. A pesar de ello, lo místico o misterioso de la trama y la particularidad del malvado imperio consiguen darnos una sensación de frescura que se agradece, consiguiendo que finalmente nos libremos del peso del plagio para acabar disfrutando de lo mismo de siempre como si de una novedad se tratase.

Digno trabajo del reparto que encabeza el casi desconocido joven Tye Sheridan (X-Men: Apocalipsis, Mud), que es acompañado por Olivia Cooke (Motel Bates, Yo, él y Raquel), Mark Rylance (Mi amigo el gigante, El puente de los espías), el gran Simon Pegg (Star Trek: Más allá, Absolutamente todo), T.J. Miller (Fiesta de empresa, Silicon Valley), Hannah John-Kamen (Black Mirror, Star Wars: Episodio VII – El despertar de la Fuerza) y el villano de moda Ben Mendelsohn (Rogue One: Una historia de Star Wars, La última apuesta).

Veremos como va encajando el público esta superproducción, por ahora se está lanzando a las salas de cine a verla que ya es importante. Se convertirá en cinta de culto como he leído ya en algunos sitios? Marcará un punto de inflexión en el cine de Hollywood? El tiempo lo dirá, como siempre, pero estos calificativos y éxitos a largo plazo acostumbran a quedar reservados para trabajos que rompen, que innovan, y no es el caso de Ready Player One. Siendo un muy buen blockbuster que aúna nostalgia con frescura sin duda tendrá un lugar destacado en la filmografía de Spielberg aunque no deje de parecer una filme de los que calificaríamos «de estudio». Habría que ver hasta qué punto el resultado final es fruto de los deseos e ideas del propio director o un producto comercial muy apetecible hecho a medida para el gran público consumidor de cine.

 

JORDI CIERCO

 
 

Trailer de Ready Player One


 

Huevos de Pascua de Ready Player One


 
 
Título: Ready Player One
Título original: Ready Player One
Año: 2018
Duración: 140 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Steven Spielberg
Guión: Ernest Cline, Zak Penn (Novela: Ernest Cline)
Música: Alan Silvestri
Fotografía: Janusz Kaminski
Reparto: Tye Sheridan, Olivia Cooke, Ben Mendelsohn, Mark Rylance, Simon Pegg, T.J. Miller, Hannah John-Kamen, Win Morisaki, Philip Zhao, Julia Nickson, Kae Alexander, Lena Waithe, Ralph Ineson, David Barrera, Michael Wildman, Lynne Wilmot, Carter Hastings, Daniel Eghan
Productora: Warner Bros. / Amblin Entertainment / De Line Pictures / Village Roadshow Pictures / Reliance Entertainment
Distribuidora: Warner Bros. Pictures
Distribuidora en España: Warner Bros. Pictures España
Estreno en USA: 29/03/2018
Estreno en España: 29/03/2018
Web oficial