Regresa Disney-Pixar con una nueva secuela, en este caso Cars 3. Esta vez sin experimentos presentando una historia que podría haber sido ser la secuela directa de la primera parte.
Después de una carrera de éxitos las dudas entran en la vida de Rayo McQueen. Como todo deportista de élite ve como el tiempo va pasando y nuevos adversarios más jóvenes quieren ocupar su lugar. Deberá realizar una búsqueda interior para sacar lo mejor de si mismo y decidir que lugar ocupar.
Le acompañan sus amigos de Radiador Springs y se le suman nuevos como Cruz Ramírez que co-protagoniza la cinta casi al mismo nivel que McQueen. Al lado de Cruz empezará esta búsqueda durante su entrenamiento para afrontar la nueva temporada.
El nivel de la película no alcanza el de la primera parte, pero mejora otras nuevas secuelas como Buscando a Dory, por ejemplo.
Cumple sus expectativas de emoción y entretenimiento hacia la segunda mitad pero antes hay algún que otro bajón que producirá cansancio en el ritmo de la película y en el del público infantil al que mayoritariamente va dirigido este producto (aunque esto no creará problemas con el merchandising).
A estas alturas sin nada que objetar en el tema técnico donde Pixar no falla y el nivel de detalle es excelente, aunque en esta ocasión no hay nada que destaque especialmente (como si hacía en El viaje de Arlo, por ejemplo).
El corto predecesor, LOU, como es habitual también de bella factura, sin diálogos y con mensaje a los «niños» malos.
En conjunto estamos frente a un buen entretenimiento familiar veraniego que no competirá con las masterpiece de la marca pero si llega a superar otras secuelas menos afortunadas.
OSCAR
Tráiler de Cars 3
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