All cheerleaders die es una comedia de terror centrada en las típicas animadoras de instituto estadounidense cuya función va mucho más allá de entretener al público durante los partidos del equipo de fútbol americano local.
Son atractivas, populares, atléticas, creídas, y muy prepotentes, y, como nos demuestra la película ya en su escena inicial, corren un riesgo importante en este deporte físico que es el animar, y que puede causar sin duda la muerte. All cheerleaders die nos sitúa tres meses después de su traumática introducción con el accidente de Lexi, para mostrarnos la selección de candidatas a nuevas animadoras que se realiza a principios de curso.
Tracy es la nueva, ex-bailarina del instituto Blackfoot y amiga de la infancia de la fallecida, será la nueva sensación de este equipo de insensibles y superficiales jovencitas que practican el egoísmo y la promiscuidad como religión. Todas ellas pagarán su inconsciencia cuando Maddy, la nueva, provoque al capitán del equipo robándole a su novia. Una noche de fiesta se convertirá de repente en una persecución a toda velocidad en plena noche que terminará con el coche de las animadoras despeñándose por un barranco hasta caer al río.
Será una joven gótica aficionada a lo paranormal quien descubra el accidente y en su intento por salvar a su secretamente querida Maddy desencadenará algo que misteriosamente hará revivir a las chicas aunque con curiosos efectos secundarios. Sobra decir que inevitablemente lo sucedido supondrá muy serios problemas para todo el grupo de colegas responsables de la muerte de las chicas. Aunque no solo ellos pagarán las consecuencias, sino que cualquier hombre podrá ser víctima de su sed de sangre humana. Se alimentarán de la sangre de sus víctimas succionándoles el alma para recuperar sus energías.
La película está dirigida y escrita por Lucky McKee y Chris Sivertson, y se basa en un trabajo de los mismos realizadores producido en 2001. McKee por su parte cuenta en su currículum con la película de terror May (2002), el thriller El bosque maldito (The Woods, 2006) y el drama criminal The Woman (2011). Chris Sivertson por su lado ha dirigido The Lost (2006), Sé quién me mató (I Know Who Killed Me, 2007) y Brawler (2011) entre otras. El reparto de All cheerleaders die lo compenen Caitlin Stasey, Sianoa Smit-McPhee, Brooke Butler, Amanda Grace Cooper, Reanin Johannink, Tom Williamson, Leigh Parker, Chris Petrovski, Nicholas S. Morrison, Jordan Wilson, Felisha Cooper, Sidney Allison y Libertad Green.
La verdad es que la película, que pasó con éxito por el Sitges Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, es refrescante y liviana a pesar, o gracias a, su alto contenido en sangre. No faltan por supuesto chicas guapas, sujerentes bikinis, sexo, sangre, violencia y risas. Una curiosa mezcla entre Jóvenes ocultos, Crepúsculo, Grease y La noche de los muertos vivientes. Realmente divertida y muy aconsejable.
JORDI CIERCO
Tráiler de All cheerleaders die
Título: All Cheerleaders Die
Título original: All Cheerleaders Die
Director: Lucky McKee, Chris Sivertson
Guión: Lucky McKee, Chris Sivertson
Música: Mads Heldtberg
Fotografía: Greg Ephraim
Reparto: Caitlin Stasey, Sianoa Smit-McPhee, Brooke Butler, Amanda Grace Cooper, Reanin Johannink, Tom Williamson, Leigh Parker, Chris Petrovski, Nicholas S. Morrison, Jordan Wilson, Felisha Cooper, Sidney Allison, Libertad Green
Productora: Modernciné
Año: 2013
Duración: 90 min.
País: Estados Unidos
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