Star Wars Episode Viii The Last Jedi

Star Wars: Episode VIII – The Last Jedi

Tras la esperadísima séptima entrega de la saga y la grata sorpresa que fue el spin-off del año pasado, por fin ha llegado a nuestra pantallas la todopoderosa Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi (Star Wars: Episode VIII – The Last Jedi).

La malvada Primera Orden se ha vuelto más poderosa y tiene contra las cuerdas a la Resistencia, liderada por la General Leia Organa (Carrie Fisher). El piloto Poe Dameron (Oscar Isaac) encabeza una misión para intentar destruir un acorazado de la Primera Orden. Mientras tanto, la joven Rey (Daisy Ridley) tendrá que definir su futuro y su vocación, y el viejo jedi Luke Skywalker (Mark Hamill) revaluar el significado de su vida.

Dirigida y escrita por Rian Johnson (Looper, 2012), la cinta ya venía con la etiqueta de ser una segunda entrega de una gran nueva saga de tres. En cierta manera, y tras las coincidencias entre el Episodio VII y la desafortunadamente renombrada como Star Wars Episodio IV: Una Nueva Esperanza, se sabía, se esperaba y se intuía que este episodio VIII iba a ser una reinvención de El imperio contraataca. Esas eran quizás demasiada presión y expectativas pues hay mucho fan de la saga que defiende esa segunda entrega de la primera saga como la mejor cinta de Star Wars hasta la fecha. Los que piensa así seguirán manteniendo sin duda su afirmación tras ver esta Star Wars: Episodio VIII – Los últimos Jedi.

Si bien el gran retorno de la saga de la mano de J.J.Abrams consiguió no decepcionar a un público muy exigente tras el golpe perpetrado por George Lucas a la mítica saga con los nuevos tres primeros episodios, en esta ocasión el reto quizás superaba las capacidades de un director que en realidad nunca pareció dar muestras de tener un talento o un respeto por Star Wars ni siquiera lejanamente cercanos a los del gran Abrams. Si bien este último participa en la producción ejecutiva, una vez más se demuestra que ese rol es poco más que poner un nombre y quizás algo de dinero.

Precisamente lo peor de este episodio VIII es la parte que más recuerda a las orgías de George Lucas con el CGI, y precisamente por eso, entre otras cosas, es la por parte. Me refiero a los que es un Mónaco prácticamente no evolucionado poblado de criatura fruta de CGI puro y duro recordando a caballos con un aire de ansias de libertad impuesto, falseado, y que no viene a nada. Por mucho que se intenta, queda lejos todo eso de lo que son El Imperio, o ahora La Primera Orden, y la República. Parece poco más que una excusa para meter a Del Toro, efectos visuales de más, y alguna escena de acción.

El reparto principal de la película está compuesto como no podía ser de otra manera por los actores Daisy Ridley (Star Wars: El despertar de la Fuerza), Adam Driver (Paterson), Oscar Isaac (A propósito de Llewyn Davis) y John Boyega (Attack The Block). Daisy Ridley y Adam Driver florecen muy gratamente, Boyega afloja y Isaac está sólido como siempre. Vuelven la gran Carrie Fisher y el mito viviente que es Mark Hamill retomando sus papeles de Leia y Luke. Se incorporan a la saga los actores Benicio del Toro (Sicario) y Laura Dern (Alma salvaje) en dos papeles sin recorrido. Del Toro ejerce de un Lando Calrissian de pacotilla, sobre actuado y sin carisma, mientras que Laura Dern sigue demostrando que tiene talento para esto. La parte nostálgica la ponen la presencia del actor Warwick Davis y la música del John Williams.

Es inevitable hablar del final de la película, que acaba con un personaje que no queda claro si tendrá futuro en la saga o sirve solo a modo de ejemplo, pero que en cualquier caso sobra, pues un Billy Elliot no tiene cabida en Star Wars en opinión del que firma.

Otro punto destacable y que sorprende es la falta de épica, aunque esto puede achacarse al papel conector del filme. Aún y así, la misión, el gran objetivo, la meta, es floja. El simple hecho de escapar, se sobrevivir y nada más, parece poco como gran logo para una cinta y una saga de esta envergadura. De Leia en su faceta de Superman cual angelito cableado en una función del colegio ni hablamos ya.

Llegados a este punto, alguien puede estarse preguntando, si es que todavía queda alguna persona que no ha visto todavía la película, si ésta tiene puntos positivos. Los tiene, aunque es difícil encontrárselos más allá de que nos acerca al grandioso y épico último episodio de esta mueva trilogía. Si hacemos un esfuerzo nos daremos cuenta que el arranque de Star Wars: Episode VIII – The Last Jedi es potente, con un gran Poe y de mucha fuerza visual. Por desgracia incluso ahí el Episodio VIII nos muestra unos super-mega destructores nuevos que han perdido la clase y la elegancia que caracterizaba a sus predecesores por completo. Verlos es como comparar un Rolls con un ibiza tuneado, son más propios de la saga Transformers o de la negra trilogía inicial de Lucas de hace no tantos años.

Pero volviendo a lo positivo de Star Wars: Episode VIII – The Last Jedi, aun y que sigue mamando descaradamente de El Imperio contraataca, destaco el personaje de Luke, en su papel de maestro y en claro paralelismo con el poco convencional Maestro Yoda de la saga original. Hamill culmina así el papel de su vida de forma más que aceptable. Sin duda una de las, pocas, gratas sorpresas que nos depara una Los últimos Jedis que, por otro lado, peca en exceso de tono cómico. Por mucho que Disney es Disney, y que el objetivo es el gran público poco amante de misticismo, hay demasiado cachondeo en la película. Descaradamente demasiado.

No podemos terminar nuestro complejo esfuerzo por encontrar cosas positivas en la película sin mencionar uno de los puntos más destacables de la película, que no es otro que la guarida del gran malvado estilo emperador, una cúpula roja de gran estética visual franqueada por lo que vendría a ser la nueva guardia imperial. Un gran golpe de aire fresco entre muchas cosas que no consiguen igualar los clásico de la saga. Grandes secuaces y fantástico escenario que aloja uno de los clímax del filme con todos los honores.

Podemos concluir que Star Wars Episodio VIII: Los últimos Jedi, es un filme imprescindible para todo el que disfrutó del Episodio VII y tenga grandes esperanzas de cara al capítulo final. Si este está a la altura, la gran mayoría de los problemas de los que adolece este Episodio VIII serán pasados por alto por la historia del cine y por los fans de la saga, y así debe ser.

JORDI CIERCO

 
 

Tráiler de Star Wars: Episode VIII – The Last Jedi


 
Título: Star Wars: Los últimos Jedi
Título original: Star Wars: The Last Jedi
Año: 2017
Duración: 150 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Rian Johnson
Guion: Rian Johnson (Personajes: George Lucas)
Música: John Williams
Fotografía: Steve Yedlin
Reparto: Daisy Ridley, John Boyega, Adam Driver, Óscar Isaac, Mark Hamill, Carrie Fisher, Kelly Marie Tran, Domhnall Gleeson, Benicio del Toro, Laura Dern, Andy Serkis, Gwendoline Christie, Lupita Nyong’o, Anthony Daniels, Warwick Davis, Justin Theroux, Billie Lourd, Lily Cole, Temirlan Blaev, Sara Heller, Josiah Oniha
Productora: Lucasfilm / Walt Disney Studios Motion Pictures
Distribuidora en España: Buena Vista International Spain
Estreno en USA: 15/12/2017
Estreno en España: 15/12/2017
Web oficial