No cabe duda que la publicidad y el marketing en el cine están en constante evolución. A los grandes y pequeños estudios no se les escapa que una buena campaña puede suponer millones de espectadores en una taquilla cada vez más disputada, debido a la gran cantidad de estrenos que cada semana se producen.
Es por ello que los creativos y las marcas se rebanan los sesos para lograr esa viralidad cada vez más disputada que en muchos casos puede ser la diferencia entre el éxito y el fracaso de una película. Nada es al azar, todo está estudiado al milímetro para sorprender al gran público y atraer su atracción, cada vez con elementos más originales y novedosos. Pero que nadie se equivoque, sin el respaldo de grandes profesionales, ninguna de estas campañas destinadas en su mayoría a internet y redes sociales, el fracaso está asegurado.
Uno de los casos más destacados de buena gestión de publicidad y marketing en el cine en los últimos años fue el de «El Proyecto de la Bruja de Blair«, una cinta de terror que con un presupuesto de tan solo 22.500 dólares, logró una recaudación cercana a los 250 millones de dólares gracias a una estupenda campaña de publicidad que nos hizo creer a todos que aquello era mucho más que una película.
Con un estilo diferente pero también con gran repercusión tenemos el caso de Deadpool, película que consiguió alzarse entre las más taquilleras gracias a una campaña absolutamente irreverente y transgresora en las redes focalizada y adaptada a cada país de estreno del filme dando importáncia al impacto local.
Hoy en día se hace indispensable la ayuda y el buen uso de herramientas como Google, Twitter y Facebook para lograr gran difusión y viralidad de una película y por ende de cualquier producto o marca que cualquiera quiera situar en el mercado y desee hacerlo conocedor al público.
Campañas originales, ofreciendo un valor o contenido añadido y atractivo para el público se hacen imprescindibles para lograr mayor difusión y éxito en cualquier producto. Un perfil en las principales redes sociales del Oso Ted de la famosa película de Seth McFarlane, trailers interactivos como el de la exitosa «Blancanieves y la Leyenda del Cazador» o la creación y difusión a través de la red de contenidos especiales para crear gran expectación son prácticas habituales en los últimos años y que han demostrado cosechar muy buenos resultados.
El caso de Prometheus, de las últimas entregas de X-Men o del famoso vídeo promocional de la película Chronicle, en el que se adivinan unos supuestos hombres voladores en la ciudad de Nueva York que consiguieron colarse en los informativos de todo el país, son solo algunos ejemplos de los réditos que se pueden obtener con una buena gestión de plataformas de difusión y redes sociales.
En nuestro país, no somos ajenos a estas exitosas prácticas, una excelente gestión de las principales redes sociales de películas como 8 Apellidos Vascos o Kiki: El Amor se hace son tan solo algunos de los ejemplos que confirman que las redes sociales son una vía directa y muy efectiva para conectar con nuestro público objetivo, cada vez más asiduo al uso de las mismas.
Aunque sin duda lo mejor está por venir: realidad aumentada, futuras actualizaciones de las principales redes sociales que permitirán mayor interacción si cabe con el público, realidad virtual y todo aquello que podamos imaginar, serán nuevas herramientas que los grandes estudios y sus equipos de publicidad y marketing utilizarán para lograr captar la atención de todos nosotros y hagamos que nos rasquemos el bolsillo para ver sus películas.
Lo mismo sucede actualmente con la publicidad en internet, lamentablemente la sobredimension de contenidos en la red, obliga al buen conocimiento y gestión de las principales plataformas, como Twitter, Facebook, YouTube o instagram, para lograr objetivos que hace un años podríamos conseguir con más bien poco.
Hoy en día, ya nada se vende solo y se hace necesaria la presencia activa de los anunciantes en todas las principales plataformas y de la mejor forma posible. Una presencia constante en las mismas así como el tono adecuado al target de cada anunciante se han convertido hoy en día en elementos imprescindibles para una venta con éxito en prácticamente todos los ámbitos así como el mejor camino para llegar a nuestros corazones y bolsillos.
También te va a interesar:
