Ojalá Estuviera Aquí

Ojalá Estuviera Aquí, Zach Braff lo ha vuelto a hacer

Zach Braff lo ha vuelto a hacer. Han pasado la friolera de 8 años desde que sorprendió a crítica y público con su opera prima como director, Algo En Común (Garden State). En ella, Zach nos llevaba de la mano de su vuelta a la adolescencia, su reencuentro con su madre fallecida, con un padre con el que no puede llevarse bien, con sus antiguos amigos, y con una segunda oportunidad en el amor. En una numerosa composición de planos y música pop indie poniendo banda sonora a su propia Crisis de los 20. Todo un universo muy personal, plagado de bichos raros, momentos tristes, pero sobretodo, sonrisas y risas melancólicas.

Tras varias participaciones creativas en diversas películas, de hecho una de ellas, The Last Kiss (El último Beso), fechada del 2008 y dirigida por Tony Goldwin, nos encontramos una esctructura parecida, un juego de planos, luces y sombras, y una banda sonora de nuevo coronada por Coldplay. Sin olvidarnos la serie Scrubs en la que se iba formando como director.

Y es que en la película que nos ocupa, Ojalá estuviera aquí (Wish I Was Here), se cierra toda una trilogía, llamémosla Trilogía de la Crisis, dónde de nuevo se vuelve a esa fórmula y donde se nos ofrece, a modo autobiográfico, otro pedacito de esa vida dura, difícil, que bien puede ser la de cualquiera de nosotros. Zach Braff dirige, guioniza y protagoniza un proyecto que comenzó como crowfunding y se ha hecho una realidad demostrando que muchas personas necesitábamos volver a su mundo y darle otra oportunidad como artista que es.

Aidan Bloom es un actor en paro que sufre una crisis familiar, no puede dedicarse a sus hijos, y su mujer tiene que estar trabajando precariamente para poder mantener el hogar. Un hogar roto que se acentúa con la inexistente relación con su hermano, y con la repentina noticia de la enfermedad de su padre. Éste hecho sirve como catarsis, para quitarse la soga del cuello y comenzar a caminar: Convertir todo lo malo en bueno, y luchar con un único arma: El “Tarro de los Tacos” una fuente de dinero (sirva como metáfora de americanismo, pero también como ese dinero que ha hecho que Zach Braff pueda realizar su film, salvar su película). Perfecta mezcla de risas, sonrisas y lágrimas.

La banda sonora repleta de canciones con letra de la que aportan detalles al guión, y de lugares comunes con las demás producciones que (sobretodo Garden State y The Last Kiss) con canciones de Coldplay, The Shins (con el mejor tema de toda la película), etc. que ilustra de manera auditiva perfectamente a la película. Así como también son lugares comunes de su universo personal la participación de un número de actores que ya han salido en sus películas y serie. Un ejemplo de ello es Jim Parsons, ahora protagonista de The Big Bang Theory, que repite tras Garden State.

Sin ninguna duda, el director da y regala al espectador, le devuelve su dinero, de manera retroactiva, e inunda de emociones y positivismo a quien vea la película, que como insistimos, podría formar parte de una sesión continua con las otras dos películas que protagoniza.

Raúl Martín

 

 

 

Tráiler de Ojalá Estuviera Aquí


Ficha técnica

Título: Ojalá Estuviera Aquí
Título original: Wish I Was Here
Director: Zach Braff
Guión: Adam J. Braff, Zach Braff
Música: Rob Simonsen
Fotografía: Lawrence Sher
Reparto: Zach Braff, Josh Gad, Kate Hudson, Jim Parsons, Joey King, Ashley Greene, Mandy Patinkin, Donald Faison, James Avery, Michael Weston, McKaley Miller, Pierce Gagnon, Phill Lewis, Reese Hartwig, Bob Clendenin
Productora: Double Feature Films, Worldview Entertainment
Año: 2014
Duración: 110 min.
País: Estados Unidos
Web oficial

Deja un comentario